Miguel Tito pidió la intervención del municipio de La Quiaca por graves irregularidades en el Concejo

El concejal electo Miguel Tito solicitó al Poder Legislativo de la Provincia disponga la intervención del municipio de La Quiaca y restablezca el orden constitucional, violentado por la irregular suspensión de dos ediles y la usurpación del cargo de presidente del Concejo Deliberante, hechos que caratuló como “atentado contra la democracia”.

Tito, quien fue electo por el partido Quiaqueños, expuso en una presentación al presidente de la Legislatura, Guillermo Jenefes, que la concejal suplente Luisa Gutiérrez, con la complicidad de los concejales con mandato terminado y con el apoyo del intendente, destituyeron al legítimo presidente del Concejo Deliberante de La Quiaca, usurpando en los hechos y por la fuerza el cargo de presidente del cuerpo.

“A fin de evitar que la legítima composición del concejo deje sin efecto lo actuado, se inició Juicio Político y suspendió a los dos concejales con mandato vigente. Parece una perogrullada aclararlo, pero no respetó el debido proceso, ni aseguró el derecho de defensa y tampoco respetó los motivos o causas taxativas que prevé el ordenamiento jurídico para este tipo de procesos excepcionales”, señaló Tito.

Agregó que con la determinación adoptada, el Concejo quedó sin quórum y en consecuencia, sin la posibilidad de conformar la Comisión de Asuntos Institucionales, Peticiones y Poderes para que se expida sobre la validez de los títulos de los concejales electos para que puedan asumir sus bancas. En otras palabras, remarcó, el cuerpo quedó integrado por un sólo concejal.

La grave situación –dijo luego- empeoró con el transcurso del tiempo y llegó a su punto culmine el miércoles 11 de diciembre, “cuando atribuyéndose el cargo usurpado dejó sin efecto la convocatoria prevista para el desarrollo de la sesión preparatoria convocada por el legítimo presidente y convocó para una nueva sesión. La misma se llevó a cabo sin el quórum previsto en el art. 92 de la Ley 4466, aprobó el dictamen de la Comisión de peticiones y poderes, que tampoco tenía quórum para sesionar (art. 60 del Reglamento Interno del Concejo Deliberante de La Quiaca), y en la que se tomó juramentos a solo 2 dos concejales electos”.

Tras remarcar que La Quiaca “ha sido blanco de un atentado contra la democracia”, dijo Tito que es una facultad prevista por la Legislatura el de sancionar la ley que disponga la intervención “…en los casos de grave alteración de su régimen de gobierno y por un plazo no mayor de seis meses…”.

En ese sentido subrayó que la nulidad de la sesión en la que juraron los concejales electos “es absoluta y nuestro equipo de trabajo está elaborando el planteo judicial que atacará el acto inconstitucional y sedicioso”. Los tribunales no dudarán “en restablecer la juricidad de lo actuado y declararán la nulidad de la sesión, dejando al concejo sin la posibilidad de sesionar, destruyendo el sistema republicano de gobierno previsto en el art. 1 de la Constitución Nacional y segundo párrafo del art. 1 de la Provincial”, expresó.

Para el concejal electo, “no es una novedad que la Municipalidad de La Quiaca ha trastabillado en sus gestiones, las que están teñidas de irregularidades e ilicitudes y con el concejo sin funcionar se le da luz verde para que sigan los desmanes.

En la presentación al presidente de la Legislatura, Tito le solicitó que por su intermedio “haga las gestiones que pueda a fin de que la Provincia, cuya vicepresidencia ejerce, no convalide esta situación y desconozca estas autoridades de facto que han subvertido el orden constitucional”.
“Nuestra Constitución es muy gráfica al respecto “La provincia no reconoce los derechos y obligaciones creados por otros órganos o personas que no fueren los que la Constitución Nacional, esta Constitución y leyes dictadas en su consecuencia instituyen y declaran con capacidad para reconocer esos derechos y obligaciones, salvo los reconocidos en sentencia judicial firme dictada por el Poder Judicial o en actos administrativos dictados conforme a las referidas constituciones y leyes…”, recordó.

“El pueblo de La Quiaca está cansado de la impunidad, soberbia, falta de control en la gestión pública, abuso de poder, corrupción, 2 (dos) años que el concejo no funcionó, 2 (años) que el Intendente no rinde cuentas al Concejo Deliberante de La Quiaca, por ello he elegido el art. 6 de Nuestra Carta Magna Provincial para advertir a ese Cuerpo que estamos en la antesala de un verdadero estallido social de alcances indescifrables”, expuso al concluir.

Fuente: El Libertario